viernes, 11 de marzo de 2011

Marido de ocasión

Con este amargor tan extraño que tengo por el funeral de mi amiga, voy mezclando en mis pensamientos, a pesar de mi dolor, que queda libre su “marido”. Que en tantas ocasiones fantaseé con él, atento, caballeroso, con principios y una verborrea inacabable, nunca te aburrías a su lado. Pero en cambio, todas sabíamos que era un mujeriego que donde veía una falda se perdían sus pensamientos de fidelidad. Siempre pensé que eso lo hacía porque ella no supo conquistarlo de verdad.

Ahora el camino lo tengo libre... Pero me pregunto ¿no habrá matado él a mi amiga para estar conmigo?

No hay comentarios:

Publicar un comentario